Silícea después de la vacunación.

Por. Constantine Hering

Traducido de: (The Hahnemannian Monthly Vol. 7, 1872)

John Redman Cone, profesor en la universidad de Pensilvania, con el presidente Jefferson, uno de los principales introductores de la vacunación a este país, vacuna regularmente a todos y cada uno de sus nietos.

A un pequeño niño parece no haberle funcionado inclusive después de repetirla. Cada vez que la viruela regresaba el anciano regresaba a vacunarle. La última vez que la operación se llevo a cabo fue seguida por una fiebre, y en lugar de la formación de una pústula, en el brazo convulsiones tomaron lugar. Siendo el médico de la familia por años (anteriormente y después) fui llamado.

Las medicinas usuales no funcionaron. Después de un cuidadoso estudio y examen de toda la Materia Medica SILICEA 30 c un glóbulo fue dado, y la recuperación del pequeño tomo lugar. Este fue uno de los hechos que indujo al padre del pequeño a estudiar homeopatía, y J. Redman Coxc Jr. Se convirtió en profesor del colegio médico homeopático de Pensilvania.

Algunos años después siendo llamado a consulta, en un caso de convulsiones violentas, que de repente atacaron a un niño de 12 años de edad, algo similar en cuanto a síntomas, a los del caso descrito con anterioridad, me llevaron a la pregunta de que si había sido vacunado últimamente; a lo que contestaron que ¡así fue! Pero que no le había prendido, SILICEA 30, un glóbulo, fue dado, para la sorpresa de los homeópatas practicantes. El niño mejoro y se recupero muy pronto. Ambos fueron vistos ya como hombres jóvenes y saludables 20 años después.

Un caso de absceso peligroso en la axila y otro caso con una gran Hinchazón llamada supuración erisipelatosa donde SIlicea hizo de lo mejor; fueron recordados por este último caso de convulsiones y desde esa vez SILICEA se ha administrado en toda consecuencia mórbida ocasionada por la vacunación; Cuando los síntomas no indican algún otro remedio, y muy a menudo cuando los remedios mejor indicados no son suficientes; SILICEA debe darse como medicina final.

Esto fue publicado hace más de 25 años, pero parase no haberse aprobado por los partidarios de las bajas diluciones. En las numerosas vacunaciones llevadas a cabo durante los últimos meses, SILICEA ha sido administrada repetidamente contra todo síntoma consecutivo en los siguientes días o una semana o dos después de la vacunación. Solo el Virus de la viruela bovina ha sido usado. Las hinchazones rojas algunas veces extendidas por todo el brazo, la fiebre, el desarreglo del estomago, cefalea, y dolor de espalda, y de hecho, cualquier otro síntoma que aparezca mejoran rápido después de una, raramente dos, dosis de SILICEA 3 o 7m.

Convulsiones no han aparecido. La vacunación por lo general se aplica solo una vez, raramente dos.

Constantine Hering.