Las Altas Potencias.

Por. T. S. Hoyne, M. D.

(The Hahnemannian Monthly, Vol. 3)

Leído ante, la sociedad médica homeopática del condado de Cook, Illinois, Marzo, 28, 1867.

¿Porque es que muchos médicos, que se llaman a sí mismos homeópatas, no utilizan las, altas potencias? A menudo, ha sido materia de sorpresa, para aquellos que si las utilizan, que muchos de nuestra escuela descarten totalmente las altas potencias; e inclusive insulten a aquellos que si las usan.

Probablemente por la razón, de que los usuarios de las altas diluciones tienen mayor éxito. Las únicas dos razones que yo conozco, para no usarlas son; la ignorancia de su utilidad, y pereza. Verdaderamente, no parece que la 200 potencia posea algo de poder, ni parece al alópata que la 3d posea poder, y aun no hay caballero presente que pueda negar que la 3d atenuación es una arma ofensiva o defensiva, de gran poder. ¿Por qué? Porque todos los que la han usado tan a menudo, saben que posee poder para conquistar enfermedades o inducirlas a ceder. Así es, con la 200 potencia, cuando nos volvemos familiares con su uso; y somos capases de prescribir con un cierto grado de certeza, no podemos sino solo admitir que la 200 potencia, curara la enfermedad inclusive más rápidamente, que la 3d o la 30c. Aquellos que no han experimentado con la 200 potencia, pertenecen a la primera de las clases --- la de los ignorantes.

La segunda clase comprende aquellos miembros, de la profesión que si conocen el valor de las altas potencias; pero son muy flojos como para estudiar sus casos. Con el fin de curar una enfermedad con una alta potencia, es necesario seleccionar el remedio con gran cuidado, prestando la debida atención a cada síntoma dado por el paciente; no importa que trivial, pequeño o insignificante; puede decidir tu elección entre dos remedios. Supongamos por ejemplo; que hemos decidido, de acuerdo a los síntomas dar ya sea CALC o CHINA, y el paciente dice, mi espalda suda, entonces CHINA es el remedio.

Los pacientes son muy aptos para describir sus dolencias, de una forma no muy exacta; y a menudo es solo mediante un rígido examen, que podemos saber exactamente lo que nos quieren decir. Por ejemplo; un paciente puede decir, ciento escozor mientras orino, y en realidad es escozor cuando comienza a orinar, o al finalizar, o durante la micción. En el primer caso; cuando es comenzando a orinar, tenemos solo 4 remedios para elegir; CANTH, CAUS, CLEM, MERC. En el segundo cuando finaliza, tenemos cinco, BRY, CANTH, PET, PHOS, SULPHUR, y en el último; tenemos más de 90. Es siempre el mejor plan, escribir los síntomas mientras son dictados así hay poco peligro de cometer errores. Estudiar el caso desde estos síntomas es lo que el practicante flojo teme, y por eso da tinturas madre; y mata a tantos como los practicantes de la vieja escuela.

Al graduarme, de un colegio de la vieja escuela; determine el hacer un recorrido por la homeopatía por un año, y si la encontraba mejor que la práctica de la vieja escuela, al curar enfermedades, la adoptaba. La puse a prueba por un año, y la encontré inclusive mejor que lo que había anticipado. Hace algunos meses, determine probar las potencias 200, no teniendo fe en ellas, y al final del año decidir, desde los casos tratados, si eran tan eficaces como las bajas potencias; el año no ha acabado, pero no vacilo al declarar que la potencia 200 es más eficaz en las enfermedades crónicas que las bajas diluciones, aun no decido en cuanto a su valor en las enfermedades agudas; pero aun los casos que he agregado en este papel muestran que actúan rápidamente y muy bien.

Solo he usado la 200 potencia; en mis experimentos, pero intentare probar las más altas. PARA USAR LAS ALTAS POTENCIAS NO ES NECESARIO TENER FE, SELECCIONEN EL REMEDIO CON CUIDADO, TOMANDO TODOS LOS SÍNTOMAS EN CONSIDERACIÓN Y UNA CURACIÓN GENERALMENTE SE DARÁ. La potencia 200 nunca me ha fallado hasta hoy en casos crónicos.

No estaría fuera de lugar en este contexto, condenar tales ataques hechos por el Dr. Hempel en el “American homeopathic Observer” en marzo, contra el Dr. Lippe, en donde el Dr. Hempel, muestra su ignorancia, en cuanto al valor de las altas potencias y además que es movido por rencor. En el mismo número; el Dr. Peterson, demuestra que no ha usado el “Pocket Book de Boenninghausen” lo suficiente como para saber cómo se usa; o no hubiera usado tres remedios en el caso que presento.

Pido perdón por esta digresión, caballeros, pero no pude pasar en silencio los ataques de dos homeópatas lideres, uno sobre el trabajo del más grande homeópata que haya vivido, a excepción de Hahnemann, y el otro sobre un caballero que no ha hecho más que enseñar homeopatía pura mejor que cualquier otra persona que haya vivido.

He seleccionado los siguientes casos de mi diario de pacientes, como ilustración del valor de la potencia 200 derrotando enfermedades:

Señorita S. me consulto en Diciembre, 66 por los siguientes síntomas; leucorrea amarillo viscosa, orina pálida y maloliente, dolor en la parte baja de la espalda, siendo de una diátesis escrofulosa, SULPHUR 3 quedo, una dosis al día; Enero 67, informa algo mejor, pero los síntomas de leucorrea y urinarios sin cambios, ALUMINA 200 se prescribe, una dosis al día, y en 7 días el caso fue dado de alta como curado.

Diciembre 30, 66, Señorita, H. dieciséis años de edad, se queja de una leucorrea amarilla, espesa y purulenta, se prescribe SABINA 200 una dosis al día. Enero 20, 67, se reporta mucho mejor. Se continúa con la misma medicina, una dosis cada dos días, Febrero 1 se reporta muy bien.

Señor, A. K. afectado con tuberculosis pulmonar, menciona los siguientes síntomas; Enero 67, dolor agudo en la base del pulmón izquierdo, tos seca corta, con expectoración de moco blanquecino, débil después de toser, fiebre nocturna, crudeza de la garganta, y dice estar mejor en el aire frio y seco. Se prescribe LYC 200 cada seis horas hasta mejorar, y luego una dosis al día, se fue al sur y en un mes regreso, con aumento de peso, y muy bien.

Sr. G. 18 años de edad, ha estado bajo tratamiento alopático, por 16 meses, llego a mi cuidado en Diciembre 7, 66, su condición entonces era, pie derecho e izquierdo hinchados y dolorosos al ejercicio; algo de dolor en el pecho, y cabeza, particularmente las sienes, es bastante estúpido; debido probablemente a estar entre extraños; dice estar peor en tiempo húmedo, mejor en frio, e inclinado a estarse moviendo la mayor parte del tiempo. Se prescribe BRYO. 200, una dosis cada noche. Mejoro lentamente hasta Enero 23, 67, cuando sale a la nieve con sus pantuflas. Los síntomas esta vez eran; pie derecho y rodilla hinchados con un dolor dolorido, identificado a la presión; dolores en el codo derecho, falta de apetito, dolor de cabeza sien derecha (exterior) solo de vez en cuando, tos aguda seca por la mañana, sueña con su hogar y amigos; y que navega en el lago, los sueños duran mucho tiempo, ha tenido sangrado por la nariz varias veces desde la exposición, intestinos regular, corazón late rápidamente, y pueden ser vistos los latidos contra el pecho. Se prescribe MERC VIV 200, una dosis un día. Y se continúa con placebo SAC LAC. Hasta el 2 de marzo, cuando se dio de alta curado.

C. fue arrebatado temprano en Marzo, con una forma terciana de fiebre intermitente. El escalofrió venia al menos cada dos horas. Los síntomas prominentes eran, nausea antes de la fiebre dolor de cabeza durante la fiebre y después, sed durante el escalofrió y calor, ausente durante el sudor, delirio y Zumbidos en los odios durante el calor; el calor era predominante, el escalofrió duraba solo unos momentos y el calor unas cuantas horas; la orina oscura y ofensiva y constipación de los intestinos. Durante el apirexia, labios secos, sabor metálico en la boca, y más o menos dolor de cabeza. El paciente sufría con la enfermedad frecuentemente y siempre “cortaba la fiebre” con quinina. Prescribí NUX VOM 200 y el paciente no tuvo más escalofríos.

W. sufriendo de Gonorrea, sobre el cual trate casi todo remedio que aparecía en los libros, al final se decepciono y me dijo que solo me daría una oportunidad más. Anote los síntomas como me los dio, y le dije que me llamara en la mañana y le daría algo. Los síntomas eran pocos y así; descarga amarillenta blanca, muy libre por la mañana, dolor en el glande del pene mientras orinaba; prurito en el cordón espermático; hinchazón de las glándulas, y sensibles al ser tocadas, intestinos constipados, y poco apetito. Prescribí MERC CORR 200, y no lo volví a ver durante un mes, cuando me dijo que la descarga había cesado el día siguiente. Ya había prescrito la misma medicina a la 3d y 6c antes.

Señorita G., constipación obstinada, para la que NUX V 3, BRY 3, Op. 3, Alum 3, etc., ya habían sido prescritas, sin remediar el problema, Alumina 200, se prescribió con una curación permanente del problema.

Solo he experimentado la 200 en las siguientes enfermedades agudas;

Erisipelas un caso, diarrea uno, inflamación del cerebro uno.

El señor B. atacado en Febrero con erisipela facial, en ambos lados, extendiéndose a la raíz del cabello. Síntomas prurito en los miembros y la espalda, manos calientes, cara caliente y ardiente, con una sensación como si agua corriera de la cabeza a la barbilla. Acostado de lado derecho sueños fantasiosos; del lado izquierdo de problemas. Harina de alforfón aplicada, y SULPHUR 200, dado cada tres horas, Atacado febrero 28, descarga Marzo 3, aunque a pesar no presento por varios días después su usual apariencia.

Pequeño de edad 5 meses, atacado en Febrero 12, 67, con diarrea. Las heces frecuentes, color claro, oliendo a huevos podridos. El pequeño estaba inquieto, quejoso, y somnoliento después de media noche; considerable esfuerzo al obrar y ocasionalmente vomitaba por el esfuerzo. Prescribí SULPH 200 tres veces al día, al siguiente día bien.

El siguiente caso que debo mencionar es de inflamación del cerebro. Pequeño de edad 7 meses, robusto, cabello obscuro, y muy activo, fue arrebatado con fiebre violenta, respiraciones frecuentes, pulso rápido e irregular. Las pupilas dilatadas los intestinos flojos, y lloraba constantemente día y noche. BELL 200, fue prescrito una vez cada dos horas, a extenderse cada 6 horas cuando mejorara. Una mejoría fue notable después de la segunda dosis, el niño durmió por hora y media o más. En 48 horas el niño estuvo bien.

Otros casos pudieron haberse mencionado, pero seleccione aquellos en los que se, que el remedio dado produjo el resultado deseado. Si otros miembros de esta sociedad, prueban las altas potencias, equitativamente; creo que llegaran a la misma conclusión a la que yo he llegado; que son tan buenas para curar enfermedades como las bajas potencias.

T. S. Hoyne, M. D.